Teatro y Debate
Antonietta Mercuri es recordada por sus aportes al teatro del medio siglo y por ser representante del periodo más significativo del teatro universitario.
En 1968, Antonietta regresó al país después de terminar sus estudios en Roma. Viajó a su natal Pereira y se vinculó al Instituto Municipal de Cultura como profesora de interpretación, y a la Universidad Tecnológica de Pereira, UTP, como profesora del Instituto de Bellas Artes. Para 1971, es nombrada directora encargada del Departamento de Teatro.
Al iniciar sus actividades organizó tres grupos teatrales: uno infantil, otro de carácter plural al que podían asistir colegiales, empleados, obreros, etc., y otro más con estudiantes de la UTP. Estas experiencias se terminaron al poco tiempo. Para lograr un trabajo artístico continuo y más determinado, Antonietta decidió unificar en un solo conjunto a los individuos con mayores aptitudes, disponibilidad y compromiso con el arte escénico. Después de un tiempo lo consiguió y fue este el que se destacó dentro del concierto regional y de los grupos universitarios.
Como cualquier agrupación, algunos miembros del elenco permanecieron más o menos tiempo, o estuvieron involucrados en distintos montajes. Por tanto, fueron muchos los que recibieron formación de Antonietta. Todavía hoy varios de ellos mantienen el legado de la maestra y la recuerdan:
Reyna Sánchez, actriz que continúa vigente en las tablas. Jairo Santa, dramaturgo, maestro del arte escénico y del cine. Jaime González Moscoso, director de teatro. José Joaquín Montoya, formó parte del Teatro Itinerante del Sol. Hernán Acuña, escenógrafo. Martha Montes, Lilián Salazar, Rossina Molina, Ana María Arenas, Hugo Correa Londoño, Mario Hernán Salazar (q.e.p.d.), Luis Fernando Montoya (1956-2018), José Carlos Vinasco, José Fernando Marín, Helmer Zapata, Fabio Castiblanco, Jorge Ramírez, Hernán Acuña, Manuel Correa, Mario Rabagli, Jaime González, John Jairo Posada, Delio Duque, José Carlos Vinasco, Juan Morales, entre otros.
Al poco tiempo se decidió que el grupo fuera conocido como Los Juglares, y es con este nombre que se le reconoce en el movimiento teatral colombiano. Además, cuando Antonietta fue presionada a renunciar a la Universidad Tecnológica de Pereira, se asentó en Cali y actuaba en solitario como juglaresa.
Foto mecanuscrito: ponencia teatro universitario. Antonietta Mercuri
En 1971, después de presentar Bananeras en Pereira y Cali, durante la selección de grupos que asistirían al festival universitario, es cuando Toña y su grupo deciden hacer un cambio fundamental en su trabajo artístico. Así lo describió ella en la historia que redactó, para dejar memoria del grupo:
“[…] El grupo debió participar en las finales de Cali, y las luchas internas que se dieron dentro de los grupos políticos reflejo del agitado momento histórico que se vivía en la universidad colombiana, y del cual fue blanco el grupo, determinó un cambio en el grupo, su independencia de cualquier tendencia política (sic). La experiencia de Cali, que en un principio se vio como negativa, marcó una nueva visión del trabajo del grupo más positiva, al entender que su mayor compromiso lo tiene con los sectores populares”.
Esto marca una nueva manera de trabajo grupal, de la escogencia de los temas y de las obras. En un principio, dichas obras fueron: El pueblo, ¿Sólo Bolivia?, Contratanto, Galileo Galilei, La maratón de engaño, Atabí, y Los tejedores.
La directora culmina así la historia del grupo, que es diciente de su posición y la del elenco y retrata las pugnas políticas que se estaban presentando:
“Es así a través de estos trabajos que se ha logrado una mayor estructuración del grupo, en constantes discusiones y análisis y restructuración de trabajos que se ha logrado la unidad. Siendo las posiciones no claras ni honestas frente al grupo las que han determinado el retiro de algunos elementos y la aparición de grupos PARACAIDISTAS (sic) que han pretendido imponer sus posiciones dogmáticas, desconociendo el proceso dialéctico que se da dentro de cada uno de los elementos del grupo, bastante auténtico y válido, porque nace de sus propias condiciones”.
Foto mecanuscrito: Historia del grupo.
Antonietta Mercuri
Foto carta mecanuscrita a la opinión pública sobre su renuncia.
Antonietta Mercuri
Después de treinta y seis montajes, mal contados, de giras artísticas, de dar a conocer el teatro por toda la zona cafetera, en 1981 renunció a su trabajo presionada por la rectoría. Regresó a Cali, y allí se dedicó a dictar clases de interpretación en una academia, a dictar cursos vacacionales para niños y niñas y a asesorar grupos juveniles.
